LAS GOLONDRINAS |
(M. Serradel) |
Adonde irá, veloz y fatigada, |
la golondrina que de aquí se va |
o si en el cielo se hallará extraviada, |
buscando abrigo y no lo encontrará. |
Junto a mi lecho, hallará su nido |
en donde pueda la estación pasar, |
también yo estoy en la región perdida, |
¡oh cielo santo! y sin poder volar. |
Ave querida, amada peregrina, |
mi corazón al tuyo estrechará, |
oiré tu canto, tierna golondrina, |
recordaré, mi mueblo y moriré. |