SIEMPREVIVA
(Alfredo Núñez de Borbón)
Penumbra en el jardín,
romance vuelto flor,
un pétalo manchado de rocío,
lágrimas de un amor.
Miento si digo que te odio,
porque en el fondo siento
que te quiero tanto
que no puedo más.
Eres gotita de mi llanto,
que por tu desencanto
quedó congelada
y no pudo rodar.
Piensa, que fuiste tú en mi vida,
como una siempreviva 
que en mi triste huerto
yo vi florecer.
Toda la miel que en tu boca encontré,
no he de hallarla en ninguna mujer.